El 26 de agosto se celebra un nuevo año de vida de la Educación Media Técnico Profesional (EMTP), y desde educarchile nos parece muy importante reconocer el trabajo de los profesores de formación técnica, presentándoles un Kit de Recursos para apoyar los procesos de enseñanza aprendizaje e invitarlos a reflexionar sobre los desafíos de la EMTP.
“Estudié en un liceo técnico porque estaba interesado en obtener un título al salir de 4° medio. Creo que la Enseñanza Media Técnico Profesional es importante, porque los jóvenes salimos preparados para enfrentar el mundo laboral y desempeñarnos en una especialidad”. Así piensa Elías Droguett (21), titulado de Técnico en Conectividad y Redes del Liceo Benjamín Dávila Larraín de Renca, quien luego de ser contratado por la empresa en donde realizó su práctica profesional, continúa sus estudios de Ingeniería en Ciberseguridad.
Elías Droguett, egresado de EMTP.
Como él, hoy existen actualmente más de 155 mil alumnos (52% hombres y 47% mujeres), que sueñan con obtener un título técnico para insertarse en el mundo laboral una vez egresados de la Enseñanza Media Técnico-Profesional (EMTP). Cómo él, muchos quieren proseguir estudios superiores, sin postergar su ingreso al mundo del trabajo, matriculándose en una de las 35 especialidades que se ofrecen en los 945 liceos técnico-profesionales del país.
En la actualidad, existe consenso entre el sector público y privado, que para que todos los jóvenes puedan cumplir esta meta -que va de la mano con el crecimiento económico y social del país-, la EMTP debe avanzar en calidad y pertinencia, al mismo tiempo que aprender a navegar en una sociedad que se embarcó en una acelerada transformación tecnológica, con digitalización, automatización, e inteligencia artificial, modificando todas las ocupaciones conocidas.
Si eres docente o directivo en un liceo TP, te invitamos a ingresar a nuestro Kit de Recursos, en donde encontrarás infografías con claves para mejorar la calidad de la educación TP, el panorama de la EMTP en la Región Metropolitana y videos en done estudiantes y sus profesores muestran una situación posible en el mundo laboral.
Desafíos de la EMTP
En ese escenario, es evidente que para la EMTP habrá nuevos desafíos. Gabriela Navarro, Directora de Programa Trayectorias Formativo Laborales, plantea que las instituciones educativas deben comenzar a formar a sus estudiantes en habilidades para el siglo XXI que les permitan adaptarse a distintas tecnologías.
“Tenemos que formarlos para que ellos sean capaces de mantenerse actualizados, y ahí estamos hablando sobre todo de pensamiento crítico. Hoy, los chicos deben ser capaces de tomar decisiones… muchas especialidades van a empezar a desaparecer, y deben tener la capacidad de reconvertirse. Por eso, las habilidades del siglo XXI pasan a ser tan relevantes, y a veces más importantes que las de una tecnología específica”, sostiene Navarro.
Para Gabriela Navarro, otro desafío se relaciona con la identidad, ya que aún falta determinar estándares de calidad propios e identificar las estrategias metodológicas más efectivas para la EMTP, diferenciándose de la educación Humanista-Científica (HC). “La calidad debería estar medida por su vinculación con el sector productivo, por el apalancamiento de recursos de su infraestructura y equipamiento, y por cómo los liceos están formando a los estudiantes desde el punto de vista productivo, lo que no se requiere en la HC. También, debemos generar mayor conocimiento sobre cuáles son las estrategias más efectivas para enseñar cada especialidad, ahí existe un espacio de oportunidad tremendo”, afirma.
Un claro avance
Con respecto a este último punto, existe un avance con la publicación en 2017 del Marco de Cualificaciones Técnico-Profesional (MCTP), una columna vertebral que ordena todo el sistema educativo TP, y que permite comprender cuáles son las habilidades que requiere la sociedad en los diferentes sectores productivos y de servicios, para crear un estándar común a todas las personas que hayan seguido el camino técnico.
Vanessa Arévalo, líder del área técnico-profesional del Centro de Desarrollo Humano de Fundación Chile, explica que este Marco define cinco niveles con resultados de aprendizaje esperados (en conocimientos, habilidades y competencias). Así, en el MCTP se establece que una persona de nivel 1, tiene que ser capaz de aplicar mecánicamente un procedimiento para realizar una tarea específica, desempeñándose con autonomía en un rango acotado de tareas simples, mientras que una persona de nivel 5, debe generar y evaluar soluciones a problemas complejos, gestionar recursos financieros o liderar equipos de trabajo.
“El marco envía señales a las instituciones educativas sobre qué aprendizajes debe adquirir un estudiante en cada nivel. Luego, permite que sectores productivos determinados, hagan el poblamiento por cada nivel, de acuerdo a los perfiles ocupacionales que requieren”, indica Vanessa Arévalo.
Si eres profesor en un liceo TP, y quieres compartir tus experiencias con colegas de otros establecimientos educacionales, ingresa a la Comunidad de Aprendizaje de EMTP. ¡Tu opinión es muy valiosa!
